"Pasé una temporada componiendo bandas sonoras. La primera en la que trabajé fue The Shout, a finales de los años 70, en la que trabajamos Mike Rutherford y yo juntos. Tanto Mike como yo estuvimos muy implicados en la realización de la película en cuanto a la coordinación de la música con la acción, pero el día que añadieron los créditos nosotros, por alguna razón, no aparecíamos. Finalmente vimos la película y empezaron a pasar los créditos justo cuando la música estaba en un gran climax.
De repente había un enorme sonido de viento que arruinó de verdad el momento musical. Al final de la película Mike estaba tan enfadado que agarró al productor y lo puso contra la pared gritando, -te lo has cargado, te los has cargado! Normalmente soy yo el que empieza a soltar cosas. Eso supuso realmente el fin de mi carrera como compositor para el cine en ese momento."
Darry
Way..............Violin, viola, teclados John Etheridge........Guitarra Dek Messecar..........Bajo Ian Mosley..............Batería
1ª cara:
- The void
- Isolation waltz
- Go down
- Wolf
2ª cara:
-
Cadenza
- Chanson sans paroles
- McDonald's lament
El mago del violín, Darryl Way,
abandona las huestes de CURVED AIR para avanzar en una línea definida
alcanzando mayor protagonismo. Formará su propia banda rápidamente y para ello
recluta a una buena partida de músicos que se mueven dentro de la disciplina
progresiva. Ian Mosley a la batería que alcanzará el mayor éxito en los 80
unido a MARILLION, formación con carácter que marcará un estilo de rock
sinfónico y progresivo, John Etheridge que más tarde ingresa en SOFT MACHINE,
Dek Messecar que lo hará en CARAVAN al comienzo de la nueva década y en la
producción un hombre sensible y de gran gusto musical que va a dejar una
profunda huella,Ian McDonald, habiendo conocido ya el éxito perteneciendo a los
maestros KING CRIMSON.
La música que desarrollan es un
progresivo que obviamente gira en torno a su líder Darryl. Sus interpretaciones
surgen en todos los temas, unas veces mucho más notoria que otras y el sonido
no difiere del realizado con su anterior banda CURVED AIR. Un progresivo que se
aleja de los arquetipos y bases asentados por los consagrados buscando agilizar
las composiciones de excesivos arreglos y muros colosales. A través de buenas
jams, fusión, improvisación y jazz en dosis reducidas hacen de sus tracks,
elementos accesibles trabajados con sintetizadores, teclados que escuchamos en
detrimento de órgano, piano eléctrico y demás cachivaches de la era dorada, sus
creaciones están dirigidas a obtener nuevos ambientes en un álbum que va de
menos a más.
En la otra cara del Lp, el
protagonismo del violinista se acrecienta en cada uno de los cortes. Su
instrumento adquiere un gran peso, sobresaliendo sobre todo lo demás. Sus
intervenciones son crecientes y decrecientes en la escala, transmitiendo un
pulso de tensión en la estructura, algo que lleva implícito las cuerdas del violín.
Llegan momentos en que los
músicos se explayan y realizan demostraciones uno tras otro
("Cadenza"). La melodía se vuelve entrecortada y caótica, tal vez
fruto de la improvisación. Las atmósferas crimsonianas empiezan a aparecer de
la mano de un Mcdonald tremendamente influenciado por su trabajo con el Rey
Carmesí ("Chanson sans paroles") focalizadas sobretodo en el
intermedio que se establece entre inicio y coda del tema. Y para terminar con
("McDonald's lament"), canción que bien podría pertenecer a la era
Crimson de "Islands", donde el violín se abandona en un lamento
sensible, bajo una textura romántica y melancólica, obra de un Ian McDonald
inspirado que imprime fragilidad y delicadeza, materia en la que se maneja con
soltura.
"Ronnie:La razón por la que decidimos centrarnos en el trabajo en el estudio fue por el descorazonador hecho de que, durante años, no pudimos perfeccionar nuestra manera de tocar en directo, no había oportunidad, siempre era lo mismo: gritos enloquecidos del público, no logramos oír cómo sonábamos en directo durante casi dos años. Nunca oímos una sola nota de lo que tocábamos, era como correr las cortinas y mover el cuerpo durante hora y media sin oír nada más que muchísimos gritos."
"Antes de entrar a grabar lo que sería el último de la formación clásica, Supertramp ya estaban rotos. Lo cierto es que el carácter de Roger no era fácil; era vegetariano convencido, hacía yoga y se consideraba un genio del pop, muy capaz de diseccionar al mundo moderno pero incapaz de comprender las neuras de sus compañeros. Que éstos optaran por mantenerse al lado de un debilitado Davies y le dejaran marchar deja a las claras cuál era la situación anímica del grupo; mantenerse sin su principal compositor y vocalista suponía mínimas posibilidades de éxito, hacerlo con él, ninguna.
Quizás para asegurarse el futuro con mayor solvencia el disco salió adelante, pese a todos los problemas, y Hodgson fue invitado a participar en la gira posterior, registrada y editada como The farewell tour, y que a pesar de todos los problemas fue realmente una despedida a altísimo nivel."