Jimmy Forest.............Teclados,
voz
Davy Patterson..........Bajo,
voz
John Barclay..............Guitarra,
voz
Peter Gavin...............Batería
(Invitado)
1ª cara:
- Love is life
- I couldn't face you
- Blue song
- Man in a boat
2ª cara:
- Ain't it a pity
- Tree of life
- Sad man reaching Utopia
- Fussin and fighting
Atención a esta obra, un trabajo magnífico único, digno de encontrarse en la vitrina de los grandes entre los grandes, sin apenas difusión y donde el desconocimiento de la banda es prácticamente total, apenas tenemos la información de los nombres de los componentes, un trío de ases con la compañía de Peter Gavin del que si se sabe más, puesto que estuvo en otra formación de poca proyección, JODY GRIND, estupendos también, pero al fin y al cabo muy anónimos para la mayoría del público que no esté familiarizado con el rock progresivo en capas inferiores.
Como digo, es increíble que este álbum pasara tan desapercibido, pero así son los éxitos y las miserias del rock en ciertos momentos de su corta historia. Se grabaría en Londres, pero sus miembros provenían de tierras más arriba, de Escocia, e incomprensiblemente su breve edición y difusión tuvo que realizarse en tierras germanas, algo que me gustaría llegar a entender algún día. Terminado el disco, el grupo desaparecía, algo muy lamentable viendo la calidad que atesoraba.
Estos chicos de nombre "festivo" hacían una música que se caracterizaba por el dominio de los teclados, pero más en concreto del órgano, muy personal en la manera de ejecutarlo, muy incisivo y lisérgico en algunos momentos, con picados muy remarcados, correrías, cabriolas y barridos frecuentes, sin embargo en otras ocasiones hacen de pantalla de fondo, generando capas de atmósferas envolventes con cielos cargados gravitando. Su sonido es muy progresivo, alimentado por el coctel especial de piano y órgano que crean entramados fantásticos dignos de bandas como PROCOL HARUM, CARAVAN o incluso DOORS, con esa vena de psicodelia que desprende algunas veces y la forma de atacar el órgano.
Otro elemento que le confiere mucho atractivo son los "grooves" que consiguen en algunos de los temas (Love is life, Ain`t it a pity, entre otros) ofreciendo un sonido cargado de energía y potencia en la triada batería - bajo - piano. Siendo preferentemente progresivos, sus raíces, la esencia que se esconde proviene del blues y rhythm 'n' blues, y queda manifiesta su pasión en Blue song, todo un clásico blues, pero además las guitarras trabajan en ese sentido, creando unas disertaciones y unos ataques tristes de sabor añejo que llegan a dibujar lamentaciones, ayudado por la voz que se acopla a la situación. Creando un todo que se encuentra en la órbita de bandas como THE KEEF HARTLEY BAND con ese toque vetusto, sureño, regado por la vibración del órgano hammond.
Sonido que se muestra fresco, inspirado y de una brillantez patente, capaz de trasladarnos por diferentes escenarios: Sobriedad, solemnidad, romanticismo, épica todo ello tratado siempre con la mejor selección en las melodías bien vertebradas por el órgano de Forest y avivadas por la magnífica sección rítmica. Buen gusto se mire por donde se mire. Una joya que se va desvelando mejor aun si cabe con cada escucha.