"Mick Jagger se compró su primera guitarra a los quince años, a escondidas y aprendió por sí solo, ahorrando con su habitual tacañería (se hizo portero de un hospital para recoger más dinero para la guitarra).
"La historia sentimental del líder del grupo conoce dos nombres decisivos: Marianne Faithfull, su eterna novia durante los años 60, modelo, actriz y luego cantante, y Bianca Pérez Morena de Macías, costarricenses residente en París, asidua de los playboys franceses, con quien se casó en 1971 cuando Bianca esperaba el primer y único hijo de Mick, en su etapa de residencia en la Costa Azul. Posteriormente se divorciaron y Jagger ha sido asiduo de numerosas rubias y exuberantes modelos, entre las que destaca Jerry Hall. Se le considera un ser desconcertante, perfeccionista en el trabajo y con un gran espíritu creador. Contra la imagen de quienes piensan que es un huracán avasallador, quienes le conocen dicen de él que es cortés y amable."
Bryson Graham................Batería
y percusiones
Mike Harrison..................Voz,
harmónica, piano, teclados
Gary
Wright......................Órgano, piano, sintetizadores y voz
Mick Jones........................Bajo
y voz
1ª cara:
- Cotton growing man
- Old as I was born
- This time around
- Holy water
2ª cara:
- Wildfire
- Self seeking Man
- Times have changed
- Moriah
Una banda cuyo repertorio estuvo
de principio a fin rayando a un nivel de calidad bastante alto. Realizaron un
total de 7 Lp's en apenas 5 años y éste que nos ocupa fue el 5º en su
trayectoria. Su discurso estaba basado en un rock con raíces blues y aderezado
con una buena combinación de piano y teclados que es otro de esos ingredientes
que considero que son garantía de composiciones muy interesantes y atractivas
al oído, y a la postre puntos a favor para la banda.
Las guitarras en este álbum son duras,
graves, en ciertas ocasiones sucias con un sonido que se acerca al conseguido
por las guitarras de GRAND FUNK RAILROAD con un notable acento blues (Cotton
growing man) y sin apenas solos. Un piano que golpea los bajos marcando el
ritmo y los cambios dentro del tema (Old as I was born), a la vez que el bajo y
bombo de la batería se dejan ver muy machacones. Hay instantes en que se echa
de menos más tensión en el ritmo, más punch, más chispa. Otros elementos que se
añaden a esa atmósfera blues son la harmónica, la voz de Harrison y los coros,
éstos últimos se prodigarán acertadamente a lo largo del disco.
Pero como ya he mencionado el
piano se convierte en un instrumento fundamental , piedra angular en todo
momento, y que sumado a las intervenciones del órgano y del piano eléctrico
forman la esencia del éxito que encierra este vinilo. No solo por el tejido que
se genera sino por la maestría y el conocimiento de sus músicos.
No aparecen improvisaciones ni
desarrollos enrevesados, el sonido es accesible, recordando a bandas cuyas
canciones se dirigen hacia derroteros algo más comerciales (JOURNEY, KANSAS,
GOLDEN EARRING) pero que entrañan una calidad que no deja lugar a la duda.
La producción del álbum en mi
opinión pone la nota negativa del trabajo con un sonido falto de viveza,
oscuro, en el que la actuación de los teclados queda apagada desvirtuando la
gran labor que realizan.
"Yo en ningún momento he blasfemado, y si de alguna manera he cantado en contra de la religión, no ha sido en contra de Dios, simplemente en contra de la gente que hace las reglas que te dicen cómo tienes que sentir a Dios. Para mi Dios es una cosa muy importante, pero quiero sentirla de manera particular y personal. No quiero sentir a Dios como un Señor con barba blanca, ni como un Señor crucificado, sino tener mi propio sentimiento de lo que eso significa. Estamos en un punto en el que a la humanidad le gusta ser educada y tener las cosas de una manera consciente, no con cuentos de niños ni con antiguas leyendas incomprensibles".
"De repente vimos que nos iba muy bien, especialmente en sitios como Manchester, Newcastle o Glasgow, donde antes habíamos tocado algún concierto aislado con poco éxito. Como a menudo se ha demostrado, gustamos más en las ciudades industriales. Por ejemplo, nunca nos fue bien en las universidades, éramos demasiado intelectuales para ellos. Los estudiantes querían algo más primario, mientras que gente cuya existencia era un poco más ordinaria apreciaba una música bastante elaborada, imaginativa y en cierto modo escapista".
