"Richard te contaré mi fantasía, me dijo Jimmy, Me gustaría tener a Joni Mitchell sentada a los pies de mi cama, tocando la guitarra y cantándome. No siguió describiéndome sus fantasías, pero supongo que querría otras cosas de Joni, además de que le tocase la guitarra"
"Llegó diciembre. Exactamente, el 15 de diciembre, Chrissie, con tan solo veintiún años, recibió la noticia de que, a pesar de las promesas, Mick había decidido suspender las vacaciones que pretendían pasar juntos en el Caribe. Tan suspendidas que los billetes de avión habían sido devueltos.
Sola, aquella noche lluviosa y fría de diciembre, en aquella horrible mansión enHarley House, con su perro, sus seis gatos y tres canarios, atrapados en una jaula victoriana que Mick le había regalado sutilmente en su veintiún cumpleaños, Chrissie se metió todo un tarro de barbitúricos. Aunque no se sabe a ciencia cierta, parece ser que Mick Jagger fue el que la salvó al regresar a casa, pero ni aun hoy día Chrissie lo sabe con seguridad.
Chrissie recuperó el conocimiento en el Hospital St. George, en Hyde Park Corner. Ni siquiera las enfermeras sabían su nombre. Cuando estuvo un poco recuperada, fue trasladada a una clínica privada en Hampstead. Durante un par de semanas recibió una terapia especial. Mick Jagger nunca la visitó.Sus padres y su hermana se encargaron de ella.
Cuando salió de la clínica, los tabloides no hacían más que publicar fotos de Mick Jagger y su nueva novia. Marianne Faithfull. Ni una palabra del intento de suicidio de Chrissie. La oficina de los Rolling Stones lo había tapado todo, absolutamente todo.
(El Sargento Pepper nunca estuvo allí. Julián Ruiz)
Extraño
experimento que resulto ser una pieza de colección con el tiempo, y
que gracias a una reedición publicada no hace mucho ha servido para
hacerme con ella en vinilo y por un precio asequible, como debería
ser con las reediciones. En 1970 se produjo un conjuro para que
coincidiese una serie de músicos excepcionales con idea de construir
un proyecto serio que al final se quedó en eso, porque apenas sirvió
para publicar este LP y nada más. Un ambicioso deseo de
Raymond Gomez, ex-Pekenikes que enroló a su hermano
Jean Pierre un ex-No, guitarrista también, a Mathias
Sanvellian un fan del incipiente prog que estaba empezando a
surgir por Europa, al ex-bajista de Pekenikes Ignacio Martín
Sequero y a un Tal Bob Thackway que pasaba por
allí, para tocar la batería. Bob había llegado a tierras hispanas
con su banda mod, pero al no fructificar la incursión
inglesa, los deja e ingresa en la formación de Miguel Rios en 1968.
Un puñado de músicos con mucha calidad, sobrios y experimentados
que van a realizar una obra que no debería pasar inadvertida para
cualquier aficionado a la música Rock.
España
en aquel momento no estaba preparada para asimilar un disco como
éste, demasiado avanzado para la mayoría del público, y eso paso
factura hasta el punto de que terminó con ello. No se conoce que
hubiese ningún tipo de promoción, divulgación, distribución y
menos todavía conciertos de estos excelentes músicos. El título
del disco es una muestra de su clandestinidad en aquel momento, Npk2
(Leído suena En pecados), un término que no estaba bien visto en la
España pudiente rancia y clerical. Su entrada en el mercado del Rock
no llegó a dejar huella alguna, era como si no existieran y sin
embargo con el tiempo se ha convertido en una joya aquí, y allende
los mares, y sino pregunta en Japón por ellos.
Como
era de esperar después del “triunfo” obtenido, vistas las
perspectivas, deciden poner fin al asunto para no crear más dolor
innecesario, Ray Gómez se añade a Pop Tops, Jean
Pierre y Mathias se
unen a Canarios y Bob
continúa con su espíritu libre grabando para otros artistas más
conocidos, Grecas, MiguelRios, Solera y en los
80 hasta con los Ñu
en su magnífico Fuego,
disco que reivindico desde aquí si alguien no lo ha escuchado.
La
producción más que correcta es llevada a cabo por los músicos
integrantes, al igual que la composición y aunque en la
contraportada aparezcan firmados los temas por Pekenikes –
A. Sainz, no es cierto, el
ex-pekenike Alfonso Sainz
intentó llevar a cabo un chantaje para quedarse con los derechos de
los temas escritos, pero lo único que sucedió es que el álbum se
grabó en su estudio recién creado.
Álbum
lleno de madurez compositiva donde se recogen y se ven reflejadas
todas las tendencias y variedad de estilos que entonces estaban
apareciendo en el exterior tras una década de los 60 dominada por la
British invasión.
Vamos a encontrar blues,
proto-prog,
psicodelia,
algunas incursiones características del jazz,
muestras de funky y
pop
del que no consiguen desligarse, pop que todavía estaba de
actualidad en este país y que se deja entrever todavía en las
composiciones a través de melodías contagiadas todavía de cierta
ingenuidad y un espíritu festivo como pilares de ese pop suave e
inocente que encontramos a finales de los 60 circulando
mayoritariamente en nuestras emisoras. El prog inspirado en la
distopía ó comprometido socialmente, revestido de desarrollos
instrumentales extensos, pesados
y recursos de virtuosismo que comienza a asomar internacionalmente
todavía no ha calado.
Free,
es una canción inmersa en un progresivo incipiente totalmente
comandado por el Hammond de Mathias, de tempo intermedio, suave y de
formas bien definidas que se asemeja en la estructura a piezas de los
maravillosos PROCOL HARUM,
que por entonces ya llevaban trabajo a sus espaldas. Por supuesto en
todas dejará huellas de solo de guitarra el magnífico Ray, aunque
ciertamente está muy comedido, pero eso es algo inherente a la
manera en que conforman sus temas.
La
guitarra de Ray se transforma en Chemin de fer
y funciona en modo funky con compañía del hammond que se pone a su
altura generándose un tejido difícil de separar. Un buen groove
surge de la totalidad de los músicos, con instantes de frenesí y
con una guitarra que cada vez toma el protagonismo hacia el final. Es
con Dreamy Sleeper
donde el blues nos deja su huella, incluso la armónica lidera por
momentos esta sencilla suite de aires sueltos, la guitarra se
mantiene en segundo plano y la melodía se reparte entre órgano y
piano. Termina la cara A girando Yellow flying bird
que muestra una guitarra algo distorsionada en una pieza muy
psicodélica con cambios de ritmo rotundos adquiriendo espacios de
saturación en el sonido a cargo del par Hammond-guitarra, donde el
órgano se muestra especialmente vibrante.
La
cara B recoge posiblemente mejor material, son solo 3 temas, pero
excelentes. Se pone en marcha con el más completo y más conocido en
el submundo Once upon a time,
un corte brutal en la interpretación guitarrística de Ray, un
trabajo que demuestra la calidad y virtud de este jovencísimo
músico. Ya el inicio con un magno riff nos hace presagiar que vamos
a disfrutar de material más que bueno. Una composición cuajada de
una producción impresionante, con gran variedad instrumental,
estilística y plagada de arreglos sobre todo de piano. Un
conglomerado donde podemos llegar a discernir apartados de esencia
jazzistica, variaciones de ritmo, grooves y coros, una melodía
dinámica apabullante que despeja toda clase de dudas sobre la enorme
categoría de estos hombres.
Sin
descanso, como interludio Mademoiselle
es otro temazo, eso sí, instrumental y de la mano de Mathias
nuevamente, que nos traslada con su sonido de órgano a los primeros
discos de Procol harum
que tanto escucharía seguramente en algún rincón de su habitación
asimilando sus formas. Y por
último otra pieza estupenda, Warning signals
con un riff constante de guitarra que marca un tempo rápido muy prog
con riqueza instrumental a cargo de solos de Ray, armonías vocales,
un hammond insistente y nervioso y una finalización psicodélica con
el órgano derrochando ondas que van y vienen a través del estéreo
para concluir en una saturación reverberante
clásica de la época.
Es
difícil obtener información de este oscuro trabajo, por un lado no
hay mención sobre quién es el artífice vocal, ni tampoco quien
esta a cargo del bajo, aunque creo saberlo. Parece ser que en la
publicación original aparecía en el interior más comunicación. Lo
que si aparece en el interior de la carpeta es un texto, no se quién
es el autor de ello, pero se trata de una disertación absurda donde
las moscas tienes su protagonismo….como dirían ahora “el
que escribió eso estaba fumado”…….bueno,
es muy posible.
"Diciembre de 1969, Keith Emerson y Greg Lake se encuentran con sus respectivas bandas -The Nice y King Crimson- compartiendo cartel en el Fillmore West de San Francisco. Cuando durante una prueba de sonido Emerson improvisa con el piano siguiendo unas línea de bajo de Lake, ambos se dan cuenta de que ahí hay química.
Decididos a formar una nueva banda, convencen al batería de Atomic Rooster, Carl Palmer, para que se una al proyecto". Pronto estructuran un repertorio basado fundamentalmente en versiones rock de piezas de música clásica y tras un concierto en agosto de 1970, su aparición ese mismo mes en el Festival de la Isla de Wight les consigue un contrato con Island Records."