Funcionó lo bastante bien comercialmente como par que su discográfica les dejara trabajar a su ritmo -esta vez les concederían una prórroga de un par de años, suficiente para madurar su mejor disco- y su calidad permitió establecer su reputación entre un número de acólitos que a partir de aquí se convertirán en un sólido colchón de opinión. Particularmente considero este disco injustamente olvidado y creo que, especialmente en lo que en su edición de vinilo conformaba su cara B, es de una calidad indiscutible, quizás entre los mejores veinte minutos de música que ha dado la época. Unas canciones en las que se pude masticar el spleen de aquellos momentos, en las que la melancolía e una fuerza que te arrastra a pensar de una cierta manera, a tomarte la vida a otra velocidad. Un disco aún necesario, si se dispone del tiempo suficiente."(Supertramp y los grandes magos del sonido de los 70)
Un análisis personal de una colección de vinilos que engloba el progresivo desde sus inicios y la década de los 70
jueves, 21 de enero de 2016
Crisis? what crisis?
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