Graham Bond.......................Órgano, saxo, voz
Chris Wood...........................Saxo tenor, flauta
Steve Winwood.....................Teclados y voz
Ginger
Baker.........................Batería y percusiones
Ric Grech...............................Bajo,
violín
Deny
Laine.............................Guitarra y voz
Jeanette
Jacobs......................Voz
Remi Kabaka..........................Percusiones
y tambores
Phil
Seamen...........................Percusiones y tambores
1ª cara:
- Da da man
- Early in the morning
2ª cara:
- Don't care
- Toad
3ª cara:
- Aiko Biaye
- Man of constant
sorrow
4ª cara:
- Do what you like
- Doin' it
Formación de lujo arropada por
una ingente instrumentación que no será suficiente para dar con la clave del
éxito, un bagaje resultante que no está a la altura de los miembros que están
al frente. Apuesta personal del inquieto y agitado Ginger Baker que llamará a
filas a sus viejos amigos de BLIND FAITH,
con los que acababa de publicar hace escasamente un año su único plástico en
estudio. La idea era grabar en vivo un doble álbum con temas ya conocidos, y
otros inéditos.
Un disco de música con espíritu
muy abierto, que engloba tendencias muy variadas, donde los músicos se embarcan
en largas jams en las que la experimentación es el componente principal,
libertad sin patrones a seguir, solo una introducción al principio que luego
deriva en caminos inesperados, todos buscan un destello de alguno para que los
demás le sigan. Las influencias de personajes como Winwood son manifiestas, sobretodo en los primeros temas,
enarbolando un sonido que se atiene fuertemente a lo que venía y luego será más
nítido todavía en TRAFFIC.
La pluralidad de instrumentos es
enorme a lo largo de toda la obra, aparecen de todo tipo, principalmente de
metales y viento en los arreglos, flauta, saxo y una amplia diversidad de
percusiones que confieren a la música una fusión de culturas cálida y
enriquecida. Se podría hablar de la 1ª cara , al otro lado parece que todo se
encauce hacia derroteros menos vistosos, las composiciones que de por sí son
extensas nos resultan excesivamente tediosas, todo gira en torno a unos ritmos
repetitivos hasta la saciedad en una rueda interminable sobre la que los saxos
campan a sus anchas improvisando en una sesión experimental, simetría mántrica
que nos mantienen en una espiral donde no hallamos la salida.
El 2º disco baja su nivel de calidad
respecto al primero. Material básico que aporta poco en el que Ginger hace gala
de un ejercicio de egolatría brindándonos una serie interminable de
"solos" sobre unos temas ya de por sí largos en bucle hipnótico que
se estiran en el tiempo de una manera insufrible, la calidad musical es
reducida y el aburrimiento se instala.
Un solo de batería que supera
los 2 minutos está fuera de lugar bajo mi punto de vista, y aquí ese intervalo
de tiempo se queda bastante más atrás, enchufándonos un "solo" en casi
todos los temas. Cuando parece que se
pone interesante el asunto, Ginger Baker nos clava un trabajo estelar de
marras.
Al final reviven uno de los
clásicos de BLIND FAITH, "Do what you like", pero
nuevamente Baker nos castiga con una nueva demostración en solitario. Proyecto
en el que quiso darse el gustazo, y vaya si lo consiguió. Salvarán los muebles Steve Winwood, Ric Grech y
Chris Wood.