sábado, 8 de noviembre de 2025

STRIDER – Exposed (1973)

 


Ian Kewley…………………..Voz principal y teclados

Gary Grainger………...….Guitarras

Jimmy Hawkins……….....Batería

Lee Hunter………………....Bajo


1ª Cara:

- Flying

- Ain’t got no love

- Woman Blue

- Higher and higher


2ª Cara:

- Esther’s place

- Straddle

- Get ready


Este es uno de tantos casos de bandas que en los 70 dieron forma a grandes temas o grandes álbumes que luego no tuvieron ninguna repercusión o muy poca. Como en muchas ocasiones el problema radicó en la falta de una identidad marcada, un elemento especial en el que destacaran, algo que les hiciera sobresalir, sacar la cabeza por encima de los demás. STRIDER, era una banda tipo de hard rock con fuerte orientación al blues rock, voz potente y personal, una guitarra dominante y profesional y una base rítmica contundente…..una serie de características que aparecían por aquél entonces como setas en ese círculo estilístico. Razón por la cual no era posible que todos obtuvieran las mieles del éxito rotundo, siempre ha habido descartes en situaciones similares.

Ya sabemos los que nos hemos instruido en la materia que como en la vida no basta solo ser buenos músicos y realizar composiciones excelentes. Es cierto que ayuda mucho, pero no lo es todo. También entran en juego otros elementos…….la situación económica, el mánager, el productor, la relación entre los miembros de la banda, la discográfica, la buena o mala suerte......etc. Etc. Bien, STRIDER fue una de esas bandas que prometían buenos augurios…...pero eran demasiado del montón. A pesar de la calidad de sus composiciones no hubo una respuesta esperada, la falta de un hit que les hiciera subir a la cresta de la ola y lanzarlos no se produciría. A pesar de realizar extensas giras abriendo conciertos para gente como STATUS QUO, HUMBLE PIE (con quién guardan similitudes ) y nada menos que DEEP PURPLE, fue una promoción fallida, su Rock carecía de una sella de identidad que los singularizase de alguna forma.

La serie de despropósitos debió de ser abundante, el proyecto empezó en 1972 y en 1974 moría con apenas 2 años de funcionamiento. Tras Exposed, hubo una importante fractura en el seno del equipo, abandonando algunos miembros, entre ellos el vocalista, una pieza fundamental del engranaje que aunque fue sustituido junto con el batería, solo sirvió para alargar un poco más lo que parecía mascarse ya en el ambiente. Aún tuvieron el tiempo suficiente para publicar lo que sería su obra póstuma, titulada Misunderstood (incomprendido), ¿Tal vez paradigma de como se habían sentido siempre?

Lo mejor de todo es que sus miembros serían más adelante conocidos, no por su trabajo en equipo, sino por las labores que acabaron realizando por separado acompañando a grandes figuras del Rock…….cosas de la vida.

Entrando en el terreno musical de Exposed , ya he dicho anteriormente que se trata de un disco potente, de gran calidad, aunque necesitado de solidez y compactación musical, donde la guitarra es la protagonista que se encarga de elevar la temperatura llevando las composiciones al lado hard. Seguramente si no se tratase de su primer disco y teniendo en cuenta la mala trayectoria, es muy posible que la producción habría sido mejor. En cuanto a la grabación no se puede objetar mucho, es bastante correcta. Pero si es cierto que escuchando algunos de los temas se echa de menos algo más de arreglos y variedad, para rellenar momentos desnudos donde la guitarra se muestra abrupta y desgarradora. Un ejemplo de lo que acabo de mencionar se observa en el corte que abre la primera cara, Flying donde el piano, muy percusivo, se fuerza a darle armonía al sonido duro, pero lo hace de manera muy seca, se queda algo corto, entre la guitarra y la voz rota y resquebrajada de Ian Kewley el panorama es muy arisco, haciendo que la dureza se recrudezca. Igual que aquí veremos que en otras composiciones los coros intentan hacer de contrapeso.

De nuevo en Ain’t got no love el sonido vuelve a ser crudo, la voz desgañitada parece que va a sucumbir, la melodía es muy cíclica, igual que los riffs. Aparece un elemento nuevo, la armónica y el piano es eléctrico, dando más volumen y melodía. El estribillo se repite asiduamente, el sonido en general es sucio y el final digno de la ronquera que arrastran las cuerdas. Es en Woman Blue donde la melodía se relaja en dureza y se pueden observar armonías , entregando mucho más protagonismo al piano eléctrico que nos ofrece buenos momentos en pequeños pasajes acompañado de coros femeninos y con la voz de Ian más relajada pudiendo coger aire. Incluso camino de la coda, los demás componentes cantan también juntos, dejando la puntilla para el solo de guitarra de Grainger. Una revisión del tema Higher and higher, rock and blues de Jackie Wilson sirve para cerrar la cara A, versión acelerada donde el riff de guitarra arrecia fuerte tras un comienzo timorato del piano eléctrico con contundencia. La fuerza de la guitarra y la voz y la manera de atacar las cuerdas recuerda a WHO en muchos momentos. Es una pieza con mucho ritmo donde el coro repite el estribillo hasta la saciedad.

Damos la vuelta a la tortilla y nos encontramos con Esther’s place, una composición con un ritmo divertido que de inicios trabaja con riffs de guitarra acústica y un piano blues que tal vez en su lado más suave podría haber servido de single en busca del hit ayudado por ese palmeo utilizado para seguir el ritmo. Ya en el segundo round hay un giro en la estructura, el piano abre la nueva fase y da paso al solo de eléctrica. Tal vez Straddle suponga el punto débil de un disco muy completo. Es una melodía de relleno comandada por la slade guitar sin saber hacia donde se dirige en ningún momento, no termina de despegar, y no muestra nada interesante, muy insulsa. Hasta el final es un reflejo de la vacuidad que contiene. Para concluir vuelven a elegir hacer una adaptación de un temazo emblemático de la banda RARE EARTH, se trata nada menos que de Get ready, obra sublime que ocupa todo un lado en el disco de sus creadores, aquí se reduce a algo más de 8 minutos. Por supuesto no supera a la auténtica, ya que carece de muchos matices del original. La banda se la lleva a su terreno que es el hard y construyen un respetable retoño, y además lo hacen mostrando su mejor cara en lo que respecta a creatividad y dinamismo dentro de un mismo track. La guitarra es puro fuego e Ian se deja las cuerdas vocales de una forma que hace daño. En general todos los miembros realizan un trabajo sobresaliente, los arreglos son se hacen más visibles y podemos escuchar un excelente groove por parte de la sección rítmica.






sábado, 1 de noviembre de 2025

El esquizofrénico hombre del siglo XXI


"Musicalmente, la canción está al margen del resto, por la carga de electricidad desbocada y de inspirada pirotecnia rítmica que sirve de fondo a tan dislocada realidad. El ya clásico riff de guitarra inicial fue aportación de Greg Lake. Sobre él, Fripp añadiría sus rápidas líneas de guitarra. Ian McDonald dio la idea de hacerlo en Fa sostenido. Se abre así una composición que mezcla a la perfección cierta estética heavy con el jazz.

 

Fripp firmando una reproducción

Es un tema que se halla enmarcado entre dos tipos de ruido diferentes (el preludio con ese mellotrón disonante y el final con esa andanada de ruido, esta vez feroz, dividida en dos secciones). Michael Giles sugirió la idea de que la banda tocase junta y a la vez los fragmentos entre esos pequeños silencios en el medio de la canción, algo que siempre les ganó mucho aplauso en vivo. Ian McDonald aportó un solo que no bebe únicamente del be-bop, sino también del free jazz de finales de los años 60. Según él mismo, para que ese solo tuviera un aire tan angustiado decidió tocar el saxo retorcido en el suelo y en posturas imposibles para sentirse a disgusto."

                                             (King Crimson: Crónica de un malestar. Alejandro Díaz Varón) 








Recluso nº 22


"Al recluso número 22 lo obligaban a levantarse todos los días a las seis de la mañana. Le hacían barrer su propia celda y desayunaba una sopa de cebolla, nada más. A continuación, veinte minutos de ejercicios físicos obligatorios con el resto de los presidiarios. Para el almuerzo les daban un poco de pan con jamón.


Por la tarde, todos los días, volvía a ser interrogado por los oficiales de narcóticos. A las ocho de la noche se cerraban todas la puertas  y apagaban la luz. Paul confesó que la cama era blanda pero que apenas pudo dormir. era un mundo de pesadillas para él. Dice que llegó a llorar. Se sentía como un personaje de la película de David Lean El puente sobre el río Kwai. Aunque por las mañanas se quería convertir en Steve McQueen en La gran evasión. Paul McCartney tenía treinta y siete años."

                                  (El Sargento Pepper nunca estuvo allí. Julián Ruiz) 

                                                        



sábado, 25 de octubre de 2025

GRACIOUS – This is…Gracious !! (1971)

 


Paul Davies……………...Voz principal y percusión

Alan Cowderoy………….Guitarras, percusión y voz

Martín Kitcat……….....Teclados, mellotrón, piano, percusión y voz

Tim Wheatley…………..Bajo y percusión, voz

Robert Lipson…………..Batería y percusión


1ª Cara:

- Supernova

a) Arrival of the traveller

b) Blood red sun

c) Say goodbye to love

d) Prepare to meet thy maker


2ª Cara:

- C.B.S.

- What’s come to be

- Blue Skies and alibis

- Hold me down


Tuvieron una carrera de poca existencia, apenas 4 años mal llevados (1967-1971). Y es que no todo el mundo conseguía abrirse camino a través de las dificultades, económicas fundamentalmente, y otro tipo de situaciones, y GRACIOUS, estuvo en el saco de los perdedores. Fue fundado por Paul Davies y Alan Cowderoy, Davis era batería pero hasta que no ficharon a Robert Lipson para que cogiera las baquetas, no pudo Davis ejercer como frontman llevando la voz cantante, y nunca mejor dicho. El trío formado sonaba muy influenciado por gente como Cream y el blues británico emergente.

Tras una de las muchas giras que hicieron al comienzo para intentar promocionarse, Vertigo Records se pone en contacto con ellos para ofrecerles un contrato. Aceptado este, se concentrarán en estudio para realizar un primer álbum. Su primer disco, el más difundido y conocido en el mundo del Rock, titulado Gracious!, nombre diferente al que mantenían con el que serán acuñados por su mánager. El álbum se editó con la portada en blanco y el nombre del grupo, pero decidieron añadir una signo de exclamación. Su sonido era una mezcla variada de versiones con influencias de Vanilla Fudge y Moody Blues, con dirección y centrado, aunque menos maduro que el siguiente.

Pero las cosas iban a cambiar y además bastante en lo que se refiere a estilo y creatividad de las composiciones. Realizan un concierto donde se suben al mismo escenario que una banda también emergente que va a dar un golpe sobre la mesa haciendo saltar los cimientos, y va a llegar a ser todo un buque insignia posteriormente dentro del rock progresivo, se trata de King Crimson. Paul Davies queda impresionado por la utilización del Mellotrón, su sonido y sus posibilidades. Su forma de pensar sufre un colapso y todo ello se traduce en un cambio de orientación musical. Necesita el instrumento como sea, y trabajar con él para obtener nuevas formas de componer.

Se ponen manos a la obra, y el resultado es este 2º Lp This is….Gracious! que en un primer momento se iba a llamar Supernova como la suite que ocupa toda la cara A. El sello Vertigo con el que trabajaban, no estaba obteniendo tanto éxito con los grupos de carácter progresivo como esperaban. Se tomó la desafortunada decisión de no distribuir el nuevo disco, sin embargo una vez que el grupo se separó el sello Phillips, que adquirió los derechos, si lo hizo como una serie económica con el titulo This is….Gracious! Por tanto al no haber publicidad, promoción ni atención de los medios, ese segundo redondo es casi como si no hubiera existido.

La situación económica de los miembros era delicada, la falta de perspectivas, conciertos y la incertidumbre provocó que poco a poco fueran colgando las botas, y aunque iban siendo reemplazados por nuevas adquisiciones, nunca lograron que la magia y camaradería inicial retornara. Ya mucho después en 1995 llegan a una fugaz reunión e incluso graban un nuevo álbum que pasará desapercibido. Como músicos no volverán a subirse a un escenario, pero siguieron trabajando dentro de esa disciplina.

Desde luego una apisonadora llamada KING CRIMSON pasó por encima de la banda, solo hay que escuchar este This is….Gracious!, para comprender como Robert Fripp y sus huestes pasaron factura. Desde un primer momento es claro el giro musical con respecto a su primer LP. Un mellotrón entra poco a poco para adueñarse de la atmósfera y no abandonará hasta terminarlo. Es el eje de unión y dirección en la mayoría de las composiciones. Les fascina y no solo interviene en la creación sino que KitCat nos presenta improvisaciones y escarceos sobre sus teclas descubriendo nuevas fórmulas, probando y experimentando con todas las opciones a su alcance. La Identidad del sonido de la banda se podría encuadrar dentro de los parámetros de grupos como CRESSIDA, SUNDAY ó incluso unos CARAVAN, pero sin acercarse tanto al monopolio canterbury, mostrando una psicodelía tardía y un proto-prog.

Arrancan con un sonido extraño y experimental, no hay duda de que les encanta el nuevo juguete y quieren probarlo creando un ambiente más amenazador que constructivo al iniciar Supernova, pieza que está compuesta de 4 partes con una duración superior a los 20 minutos. Composición que dista bastante de lo que aparece al otro lado del vinilo. Se puede decir que es un disco bipolar, con Supernova nos enseñan un juego de claro-oscuros arrastrando ciertos sonidos que podemos asociar a la psicodelia que todavía transita por el final de década, la guitarra se muestra corrosiva en varios pasajes, y el ambiente se torna turbio y pesado con el mellotrón castigando.



Pero luego llega la claridad y salen adelante ritmos contagiosos y sonidos más cálidos con cierta ingenuidad, correspondientes al pop rock británico de los 60. Salvajes por un lado y tiernos e ingenuos por otro. Esta dualidad musical concuerda y es ilustrativo de ello la portada, con unas vidrieras que dejan pasar el sol y dentro se producen luces y sombras de la misma manera que en la concepción ambiental de la extensa suite. Es en la parte 2, donde se descubren ante el rey carmesí con un tema compuesto con una estructura crimsoniana hasta el tuétano, bien podría tratarse de Epitaph, in the court of the crimson king o in the wake of poseidon. Esos dos primeros discos son claves en la mentalidad de la banda a la hora de componer este segundo estadio. Fragmento extenso que tras un intenso instrumental iniciaticoo muestran mucho de lo que han aprendido apoyados fundamentalmente en un pesado mellotrón mientras canta Davies acompañado de coros, puro Crimson, lo mires por donde lo mires. La guitarra acústica fluye tras un silencio de fase retornando a la calidez musical y a la alegre pureza, pero de nuevo descendemos a la caverna oscura, una tónica que se repite en numerosas ocasiones. La última parte de Supernova repite patrones de luz y sombra, dejando un poco en segundo plano el mellotrón y tomando más protagonismo el Hammond, realizando excelentes desarrollos en ascenso por la escala aportando coros celestiales que le confieren un aire de épica excelente que nos transporta a lo más alto………...se me eriza el bello. Viaje onírico, sueño, vigilia……..final épico.



El clima de la segunda cara es diferente, parece que aparcan bastante el oscurantismo presente hasta ese momento. Las composiciones se hacen muy dinámicas y coloridas con aportación de mellotrón y hammond a partes iguales, la guitarra acude más al frente y deja excelentes solos, C.B.S. es una pieza que recoge lo mejor de este lado, la música llega a permitir ser bailable con accesos de psicodelia y prog primigenio. What’s come to be nos devuelve al pop rock británico más afable de los 60, con la diferencia que marca el mellotrón. Construyen combinaciones de voces estupendas y la guitarra se hace minimalista como si llevara sordina. Un riff de guitarra frenético nos introduce en Blue skies and alibis, otra pieza con aire similar a la anterior que nos deja un groove estupendo a mitad de camino a cargo del duo batería-bajo. Pieza muy animada y de brillante ejecución. La más rockera de todas se reserva para el final, Hold me down, encierra una guitarra potente de principios marcando un riff esencial, el estribillo se canta en conjunto y después nos agasajan con el solo más duro de todo el disco, y eso es decir mucho.





Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...