"Ahora quedaba vender el álbum a las discográficas. El primer paso fue obvio; tenía aún contrato con Francis Dreyfus hasta marzo de 1977, por lo que fue a sus oficinas a presentarle su obra en noviembre de 1976.
Danielle junto a Dreyfus
Dreyfus, sorprendentemente, quedó maravillado con el disco -muy a pesar de que poco tiempo antes había mostrado su indiferencia por la música electrónica-. De hecho, su secretaria por entonces, Danielle Feuillerat, decía que Dreyfus ponía Oxygène en su oficina a todo volumen hasta el punto que los cristales del edificio resonaban con fuerza. Dreyfus le dijo a Jean-Michel: "Oxygène va a ser un éxito. ¡Vamos a vender cinco millones de copias!. Finalmente fueron unas cuantas más........"
"Fripp declaró que la participación de Adrian Belew en el nuevo King Crimson no se ajustaba a lo que él tenía pensado para esta nueva época. Se lo comunicó a Belew con un escueto mail con la frase: Ya no estás en la banda. Ante esto, Belew declaró que si Fripp consideraba que quería hacer algo distinto con King Crimson que era muy feliz por Fripp.
Esto trajo no pocos quebraderos de cabeza y malestar en ambos músicos. Belew se sintió herido, ante lo que él vio como un tratamiento injusto tras 33 años de pertenencia al grupo, y Fripp se sorprendió ante las pretensiones de Belew. Sintéticamente que, en el caso de estar en la banda, los demás miembros fueran pagados solo como músicos, y no como miembros de pleno derecho. Este cisma fue resuelto con un intercambio de mensajes y una llamada que dejó el futuro abierto, pero con Belew fuera de la nueva formación"
( King Crimson. Crónica de un malestar. A Díaz Varón)
-
Introducción
-
Quien
no anda, no se mueve
-Papel
social
- No
será….?
2ª
Cara:
-
Horizonte
-
Noria de feria
-
Tiempo
-
Introducción
Su
creación data nada menos que de 1958, cuando todavía no íbamos ni
en pañales, ni se sabía lo que era eso. Pere Gené líder
indiscutible desde el primer momento retorna a Barcelona tras un año
viviendo en las islas británicas justo en el momento de explosión
del Rock and roll, algo que le marcó y le influenció de manera
determinante a la hora de entender como trabajar el Rock.
Reunió
a compañeros suyos del conservatorio del Liceo de Barcelona donde
había estudiado piano y formaron rápidamente un combo. Se llamarían
LONE STAR, como hizo años más tarde otra banda
norteamericana que desconocía que ya se hubiera utilizado esa
denominación. Como ocurría en aquel entonces iniciaron su andadura
por salas de fiestas barcelonesas, discotecas y boites realizando
mucho trabajo en directo, lo que les supuso gran aprendizaje y
tablas. Solían tocar composiciones de Ray Charles,
alguien desconocido en un país aislado como era España en ese
momento.
Ya
en 1962 por fin EMI pone su atención en ellos y firman un contrato
con el que se vinculan a la discográfica con unas condiciones que
más tarde lamentarán. Graban su primer EP en inglés, inaudito en
la época en nuestro país. Más tarde harían adaptaciones de temas
muy conocidos a nivel mundial. En 1966 consiguen grabar su primer LP,
un disco con un 50% de versiones y otro de piezas propias. Aquí es
cuando se darán cuenta en EMI del éxito que obtienen con las
composiciones de su propia cosecha, concediéndoles a partir de aquí
más libertad creativa.
Siempre
basándose en esta década en el movimiento del rock clásico y el
Rhythm and blues, también alternaron actuaciones como grupo de Jazz,
un hecho casi único no solo en España, sino en cualquier lugar del
planeta realizándolo de una forma natural. En la siguiente década
de los 70, los vientos empiezan a soplar diferentes en todos los
ámbitos. Se embarcan en una gira por CentroEuropa grabando Spring
70, un directo muy sorprendente, donde el sonido es más blues con
tendencias progresivas y con una agresividad en la parte vocal de
Pere fuera de lo común hasta entonces.
En
1972 se desvinculan de EMI, una separación muy dolorosa para la
formación, puesto que se quedan sin recibir ni una mísera moneda
por los derechos de los EP’s grabados, quedándose en bancarrota.
No les queda otra que seguir adelante buscando donde poder grabar,
para ello se asociaran en pequeñas discográficas independientes
como Unic, Diplo y Phonic, en esta
última es donde registrarían el álbum Horizonte. En Unic
firmarán su mayor éxito, Adelante rock en vivo,
directo obtenido de una sola toma y que se convertirá en el disco
más vendido por ellos y el más mítico.
Reciben
varios premios y son acreditados como el mejor grupo nacional, pero
una vez más la mala suerte se cebará y el dueño del pequeño sello
se fugará con el dinero conseguido y nuevamente sin compañía y sin
cobrar royalties tienen que volver a empezar. Y tras unos cuantos
éxitos ganados con discos como “Es largo el camino”
y “Síguenos”, donde ya muestran la energía y la
experiencia de una banda veterana y con un sonido más indicado a la
década, llegamos al que nos concierne, Horizonte,
grabado en 1977, en plena transición política española, una
situación que sin duda queda muy reflejada en las letras del disco.
Ansias de encontrar la libertad después de una largo periodo oscuro,
reflejo de la sociedad trabajadora, incertidumbre por el futuro,
desconfianza de la clase política, búsqueda de la identidad,
necesidad de recuperar el tiempo perdido….Todo ello viene incluido
a lo largo de los temas escritos.
Abandonado
definitivamente hace ya unos años ese sonido del rock de los 60, con
voces suaves, guitarras amables y esa ingenuidad típica de las
bandas que nacían a la sombra de lo que se hacía en el extranjero,
nos encontramos con un rock pesado y contemporáneo construido sobre
estructuras de 4 compases clásicos del rock, muy cerca del hard rock
con pinceladas progresivas, tal vez por encontrarse en un escenario
especial entre el rock urbano que estaba surgiendo con bandas como
ASFALTO, TOPO, LEÑO, etc y por el sur el auge del rock
andaluz y de raiz de bandas como TRIANA, ALAMEDA, CAI,
etc, hizo que unieran en cierta forma los estilos realizando un rock
potente con gran proliferación de guitarra eléctrica con secciones
duras y un gran trabajo instrumental. Si hubieran militado en una
discográfica de calibre, posiblemente la producción hubiera sido
más destacada. Pero es encomiable el duro esfuerzo realizado dentro
del pequeño sello Phonic establecido en Barcelona, con una
ingeniería muy correcta. También nos va a servir para descubrir a
Alex Sánchez, un guitarrista que no ha tenido la repercusión que
debería, y que nos deja con la boca abierta en más de una ocasión
a lo largo del álbum.
Los
tiempos que corren son demasiado importantes y como consecuencia van
a plantear su primer álbum conceptual y también el último, dentro
de su carrera. Quedando muy bien plasmadas las inquietudes que les
sacuden van a escribir una obra, un tanto crítica y con un aire un
tanto triste, reflejo de los sentimientos que se respiran en el aire
de la sociedad de entonces. Arranca con una pieza titulada
Introducción, y en efecto su primera estructura
instrumental llena de misterio envuelta en un frio viento no deja
duda sobre su papel, dibujando un paisaje de esperanza y unas notas
de piano de Gené que son como dulces lágrimas. Tal vez una
alegoría del Ying y el Yang. Al final del disco nuevamente aparece
con el mismo título, tal vez, deberían haberlo cambiado por el de
Coda, más acertado, el sonido el mismo, pero más corta y sin letra,
colofón que cierra el círculo.
Tras
ella, una hosca guitarra contundente, recia y machacona en su grave
riff nos sumerge en Quien
no anda, no se mueve,
una
pieza dura y oscura que nos invita a reflexionar sobre nuestro lugar
en la sociedad. La ruda melodía incesante se repite a lo largo de
toda la pieza donde todo gira en torno a esa guitarra, rota solo por
un magnifico solo hard de Alex en la parte central, retornando
nuevamente al runrun que se apaga con incorporación de una
pregrabación de voces recogidas en algún punto de una ciudad, por
cierto, en inglés, no fuera a ser que se oyese algo impropio para la
censura todavía existente.
Llega
algo de relajación en el sonido con Papel
social,
un
corte breve que presenta una guitarra comedida construyendo la
melodía, con una instrumentación suave que nuevamente se eleva con
el solo central de Alex , incluye unos arreglos de piano eléctrico
muy sencillos y desapercibidos, nuevamente con la temática de la
sociedad y nuestro sitio en ella.
El
cierre de la primera cara a cargo de No
será…? Nos
muestra la cara más abierta de la banda, con un tema pegadizo en su
estribillo, suena rock urbano 100% en un alegato contra la injusticia
y el egoísmo
que sufren las clases bajas del país, una pieza más festiva y menos
cerebral con grandes desarrollos de guitarra nuevamente por parte de
Alex, que en este disco está hecho un hacha. Es muy posible que de
esta fuente bebiese un inicial Joaquín
Sabina,
una pieza que podría ser de su factoría perfectamente.
Ya
con más flema comienzan la cara B con un corte donde el trabajo del
bajo es patente en la creación de los compases, nueva crítica
social en la letra desgañitándose una vez más Gené, que
parece que se vaya a romper en cualquier momento alguna cuerda vocal.
El título que da nombre al LP nos ofrece otro estribillo pegadizo
acompañado de un concienzudo solo de guitarra. Después Noria
de Feria nos hace una descripción de la vida cotidiana con
un conjunto musical pesado a cargo del bajo y una guitarra vibrante.
Es la pieza más larga y por tanto está dividida en una primera
parte grave y otra donde cambia radicalmente el ritmo con un sonido
más anárquico y un trabajo de guitarra hard y de rock and blues. El
ambiente es más dinámico y más ligero terminando sin silenciar y
enlazando con el 3º tema Tiempo, donde por fin Gené
se luce a las teclas con un magnifico y sugerente solo de piano
eléctrico tras el primer movimiento cantado, volcado hacia
estructuras más jazzys en su definición, dando luego paso a unos
arreglos combinados con el eterno solo de Alex para volver al inicio
donde el autor pide algo que hoy en día todavía sigue vigente,
incluso más…………...tiempo.
Finaliza
con la 2º parte de introducción, un instrumental que
es continuación del inicial, una forma de decir que el trabajo está
hecho, la denuncia social se ha llevado a cabo y hay que cerrar el
círculo. Un gran álbum reflejo de los tiempos políticos y
musicales de la escena llevado a cabo siempre con clase para esta
banda que siempre dio el do de pecho a pesar de los tropecientos
cambios de personal que sufrió a lo largo de su vida.
"Herd fue el sueño de la juventud. En 1967, al año de entrar en la banda, ya teníamos nuestro primer éxito en listas. Yo tenía 17 años y esto para mí fue algo fantástico.
Quiero decir que uno en ese momento puede morirse de gusto porque todo parece fácil a partir de ese instante. A pesar de ello pronto aterricé, a poco de que nuestro segundo single volviera a entrar en el top 20 inglés. Vi a mi alrededor a los muchos grupos que habían tenido una racha de impactos y que ahora estaban acabados y sin posibilidades, porque el beat, los éxitos comerciales, pasaban pronto, te daban dinero y fama pero no te hacían músico."
"Anyone's Daughter dieron sus primeros pasos interpretando versiones de bandas británicas de finales de los sesenta, orientadas hacia la psicodelia y el rhythm n' blues. Un aspecto que en el caso que nos ocupa se ve reflejado incluso en el hombre del grupo, tomado de la canción de mismo título incluida en el Fireball (1971) de Deep Purple".
Tras sus primeros 3 álbumes exitosos llegaron In Blau (1982) y Neue Sterne (1983) - ahondaron en lo conseguido hasta el momento, pero en 1984 la partida de su vocalista Harald Bareth para cumplir el servicio militar hizo que la banda tomara la resolución de separarse. Ulmer y Karpa protagonizarían un fugaz regreso en 1986 con otros músicos para dejar un último y no demasiado destacable testamento con Last Tracks (1986)
Enrique
Morales…………….Guitarra eléctrica y acústica y coros
Miguel
Morales……………..Bajo, guitarra acústica y coros
Tito
Duarte…………...……..Saxofón, flauta y percusiones
Joao
Vidal………………..….Teclados
J.
María Moll…………....…..Batería
The
Waters…………………..Coros
1ª
Cara:
-
Hi-Jack
-
Mad
love
-Funky
Baby
- Lady
love
2ª
Cara:
-
Susie Wong
-
Humanity
-
Tell me the thing
-
Fly Away
-
Concert
Si
nos dicen que una banda triunfa en EEUU en los años 70, llegando a
las primeras posiciones de las listas de música negra con un sonido
denominado como “afrobeat” o “música mestiza” , manejando
estilo funky y precediendo a la música disco que triunfará en la
segunda parte de la década, lo último que nos vendría a la
imaginación es que fueran españoles…….pues si señores, eran
españoles. Es el grupo que ostenta el galardón de ser el combo
español más vendido en EEUU, Canadá y Alemania.
Fue
tal la cuota de éxito que obtuvieron en tierras yankees, que para
que no descubrieran que se trataba de personas de raza blanca, no
aparecían nunca en las portadas y contraportadas del álbum o de sus
singles. Y es que estaban convencidos de que una música así tenía
que ser realizada por personal de raza negra. Je, y lo que son las
cosas!, aquí en nuestro país, al escucharlos cantando en inglés,
pensábamos todo lo contrario, que se trataba de alguno de tantos
grupos de origen estadounidense, pre-fiebre del sábado noche. Si es
que ya lo dice el refrán: “Nadie es profeta en su tierra”
Era
su 3º disco y debido al acierto conseguido ya con su segundo, se
marcharon a grabar a los Angeles, nada menos que a los estudios
joliwudienses de Metro Goldwyn Mayer, saldría
su obra un año después en 1974 y el efecto fue inmediato llegando
al n.º 1 en ventas, pero la versión internacional del título sería
“Release Barrabas”. Es posible que muchos de vosotros
abráis los ojos con incredulidad pensando que como pudo ser posible
aquello, siendo que España por norma general nunca obtuvo
repercusión mediática en lo musical, salvo pequeñas
excepciones………. yo también me lo pregunto. Pero no hay nada
como reunir a un conjunto de personas con mucho talento para que se
obren milagros.
La
persona clave en todo esto fue Fernando Arbex,
ex-Brincos y ex-Alacrán, que cuando decidió terminar su trabajo de
músico, paso a la sombra como un profesional de la producción
realmente dotado. Un tipo atento siempre a las vanguardias, ya en
ALACRÁN, como músico había practicado con bases latinas
popularizadas por SANTANA, además de como productor dentro
del grupo. Por desgracia no hubo apoyos de ningún tipo de las
discográficas españolas y sin actuaciones en directo desistieron
con un único LP en su carrera.
Arbex
no se rindió y siguió buscando la manera de poder llevar a cabo su
proyecto. Comenzó a buscar músicos afines a sus ideas reclutando a
Tito Duarte (Cubano), los hermanos Morales (filipinos)
y Joao Vidal (portugués) un combinado exótico, que unidos a
J.L. Tejada y J. María Moll terminarían cuajando en
los fantásticos BARRABÁS, a quienes se consideran los precursores
del sonido disco en Europa, vendiendo como decía en sus
contraportadas, música caliente. Fernando colaboraría en la
composición, pero con la producción como objetivo principal.
El
padre de Tito Duarte era el director internacional del sello RCA, eso
facilitaría el contacto de la formación con la discográfica de
manera inmediata. El camino está allanado y se ponen a trabajar sin
dilación grabando un primer disco homónimo que ya muestra la senda
a seguir donde las criticas serán favorables. Con su segundo,
“Power” estallan y la popularidad empieza a crecer con un álbum
muy completo. Sus vidas se ven salpicadas de nuevas sensaciones, el
punto culminante de sus carreras fue cuando se les ofreció ser
teloneros de sus satánicas Majestades y lo rechazaron porque era
preciso mudarse a los EEUU. Se votó y se decidió seguir cerca de
las familias. A partir de entonces la decisión fue un lastre y se
crearon tensiones, como consecuencia a finales de la década se
separaron, aunque poco después en 1981 se reunieron para grabar un
nuevo álbum, Piel de Barrabás, de cierta calidad, no
obstante el paisaje musical estaba cambiando y la repercusión fue
mucho menor, apostando por otro tipo de formaciones, solo en Europa
mantuvo un buen nivel de ventas.
Para
cuando grabaron este ¡Soltad a Barrabás! Las cosas no podían
irles mejor y todavía estaban lejos las discrepancias y malos
rollos. La música que se incluye realmente esta llena de talento
compositivo y en cuanto a la producción, Fernando realizó un
magnífico trabajo que queda patente desde el primer momento de la
escucha. Se inicia con Hi-Jack, que serviría como
presentación del LP a través de su venta en single, posiblemente el
tema más accesible para captar adeptos, que desde un primer momento
nos muestra un conjunto de percusiones , algo que no desaparecerá
ya, un bajo juguetón que tendrá un papel preponderante a la hora de
marcar el tempo y el ritmo y coros, muchos y variados tanto de ellos
como de el trío femenino que participa. La música se impregna de
sensualidad, calidez y ritmo, cantando en un inglés mejorable y con
unos estribillos a base de coros. En las zonas centrales entran los
instrumentos a realizar solos, variados en su ejecución y muy bien
elegidos, sin excesos y más bien cortos en el tiempo dejando un
regusto que sabe a poco, un acierto para mantener el interés en la
escucha.
Con
el segundo corte Mad love, en el inicio por un momento
el bajo nos engaña y parece que vaya a sonar “Papa was a
rolling stone” de TEMPTATIONS, pero no, su base es muy negra,
se produce un dialogo de declaración y réplica entre voz y coros
femeninos, la guitarra suena muy funky y nos regala en la parte
central un fantástico solo. Funky baby, como indica el
título, nos ofrece de entrada una guitarra funky con un fraseo que
ejecuta repetidamente, los coros masculinos y femeninos se suceden en
los estribillos y nos trasladan hasta el final, en un tema muy corto
incluyendo armónica en la melodía. En el siguiente y último de la
primera cara, la batería se presenta marcando el pulso a golpe de
platillo y después con la entrada del teclado y la guitarra acústica
se genera una dinámica que crea el armazón principal de la canción.
Lady love, contiene un sinuoso teclado
maravilloso y melancólico. Es la primera aparición de flauta en
los arreglos, hay cierto aire de ambientación brasileña en su
espíritu, luego hacia el final se entra en otra sección en la que
el bajo acelera el tempo terminando la pieza.
Al
otro lado del plástico nos espera Susie Wong, el
primero de los cortes que arranca con unos coros femeninos muy al
estilo, guitarra funky con protagonismo encargada del solo
instrumental, una composición muy obsesiva que gira en torno a una
frase de la guitarra. Un tema engañoso es Humanity,
que comienza con una voz cálida y muy suave pero se torna más
agitada. Es la pieza más dura del disco de hecho. Muy vanguardista
incluye saxo en su melodía con un toque de Jazz, las percusiones
resuenan potentes bajo el órgano y la guitarra se muestra fuerte,
aunque no da tiempo a más. Tell me the thing es un
tema muy ligero y cálido con gran introducción de travesera. Fly
away lleva un gran trabajo instrumental en el que el tempo va
de la mano del bajo y el órgano omnipresente flota durante toda la
composición, la guitarra nos regala un magnífico solo en la parte
central y otro al final, muy cortos, dentro de una estructura algo
más compleja que de costumbre. Y ya para cerrar este excelente disco
nos ofrece como coda Concert, para mí una de las
mejores. El órgano se muestra presente nuevamente a lo largo de toda
la pieza, una veces ambiental en muro sonoro y otras haciendo un
fraseo a modo de guiño repetidamente, luego la flauta nos concede un
interesante solo en la parte central y final dejándonos con ganas de
más.
Barrabás
es una banda que independientemente del gusto del oyente es atractiva
e interesante porque algo que tiene Calidad y talento no puede pasar
desapercibido para ningún amante de la música y yo soy de los que
reniega de la música disco. Así que si alguna vez lo tenéis a
mano, pensadlo y no lo dejéis pasar, no os defraudará.
"Elvis quería huir, escaparse. Estar solo. Donde sus buitres particulares no desvariasen. Era tan indiferente al futuro como el tener un pie en el umbral de la eternidad.
Es absolutamente falso que fuera Elvis quien tomara un avión rumbo a Buenos Aires dos horas después de su muerte oficial, utilizando el seudónimo de John Barrows que tanto había usado para hoteles y viajes.
Todavía en la actualidad se vigila su tumba en Graceland, como si la vigilia del cuerpo del último rey tuviera el poder de la resurrección, como si realmente no estuviera muerto. En realidad, Elvis sigue vivo."
(El Sargento Pepper nunca estuvo allí. Julián Ruiz)
"La Psicodelia y el primer Rock progresivo son, por ende y en este final de la década de los 60, textos de un contexto superior que los abarca y emparenta, el de la Contracultura (esa subcultura que excede su propia categoría). Dicha filiación, como la que remite a ambos a las necesidades expresivas de una nueva generación, la del Baby Boom, es insoslayable para comprender sus motivaciones y desarrollo, así como un buen número de rasgos comunes e intersecciones.
Sin caer en la simple sucesión diacrónica (el discurrir en paralelo de ambos géneros llegaría hasta la fecha), apuntamos su imbricación, la de Psicodelia y Rock progresivo, en los años finales de la década de los 60, especialmente entre 1967 y 1968, coincidiendo además con la primera difusión global de ambos."
Frank
Zappa……………………......…….Guitarras, bajo, voz,
arreglista y productor
Colaboraciones
destacadas………….Jean Luc Ponty, Ian Underwood, Bruce Fowler,
Jack Bruce, Sal Marquez Jim Gordon, Aynsley Dunbar, Tina Turner and
the Ikettes
1ª
Cara:
-
Don't Eat The Yellow Snow
-
Nanook
Rubs It
-
St. Alfonzo's Pancake Breakfast
-
Father O'Blivion
-
Cosmik Debris
2ª
Cara:
-
Excentrifugal forz
-
Apostrophe’
-
Uncle Remus
-
Stink-foot
Este
tío es “Juan Palomo, yo me lo guiso, yo me lo como”, hace
de todo y además un elemento tan inquieto es imposible que guarde
mucho tiempo una misma formación. Su discografía en solitario
demuestra el aluvión de gente con la que llegó a trabajar. Nace en
Baltimore (EEUU), siendo el mayor de 4 hermanos, constantemente
cambiaba de domicilio debido al trabajo de su padre, sintió la
llamada del arte pronto, y enseguida se decantó por tocar la batería
en la escuela secundaria. Amante del Rythm’n’blues de los 50 y de
autores como Edgar Varese con quien se obsesionó bastante, Igor
Stravinsky y Anton Weberz. Fue siempre muy crítico con la religión,
el establishment político, y la corriente musical
generalista, además de defensor de la libertad de expresión.
En
el instituto llegó a conocer y hacerse amigo de Don Van que
adoptó el nombre de “Captain Beefheart”, unidos por el
interés en el Rock and blues, influyéndose mutuamente a lo largo de
sus carreras. Entró como batería de THE BLACKOUTS, que
contaban en sus filas con miembros de los futuros MOTHERS. Su
interés como arreglista y compositor creció y en los últimos años
de escuela, componía, arreglaba y dirigía piezas de avantgarde.
Acabado
el instituto, ingresó en la Universidad, pero duró poco. Realizó
conciertos, grabó bandas sonoras y compuso y produjo para otros
músicos. Trabajó poco tiempo como guitarra en un power trío,
actuando en bares y locales, y ya en 1965 le invitaron a unirse a una
banda que cambiaría su nombre a MOTHERS OF INVENTION, donde
tocar la guitarra y ser vocalista, algo que nunca había considerado.
El productor Tom Wilson decidió ocuparse de ellos y al año
siguiente lanzaron su álbum de debut “Freak out!. Su
éxito comercial fue sobretodo en Europa y eso supuso que pudo ser
independiente durante su trayectoria.
Lo
que viene después, todos los que nos interesamos por el rock,
sabemos en mayor o menor medida lo que ocurrió. Comenzó una carrera
meteórica que no se detendría a no ser por la muerte temprana que
le llegó, fue en 1993 debido a un cáncer de próstata. Músico
abrumador, de los que cuando naces rompen el molde, incomparable, no
ha habido nadie como él. Con un físico reconocible entre cientos,
fue Prolífico, provocador, innovador, inclasificable, virtuoso,
bizarro, sarcástico, irónico, humorístico, excéntrico,
exhibicionista, experimental y no se cuantas cosas más se podrían
decir de este monstruo del Rock.
Su
discografía amplia y compleja, es diferente según la época
abarcando todos los géneros y se ha convertido en un espejo en el
que mirarse para muchos músicos posteriores. Reconozco que no
consigo hacerme a su música, demasiado densa y concentrada, me
cuesta asimilarla mucho y no soy capaz de valorarla en su juicio
justo, demasiada información en tan corto periodo de tiempo. Siempre
se me ha resistido, y no he escuchado su discografía en gran número.
Por eso he elegido este disco para comentar, un disco accesible que
recomiendo tanto a los amantes de Zappa como a los que sean
simplemente amantes del buen Rock.
Se
trata del 6º álbum en solitario y el 18º de toda su producción.
Está compuesto mayoritariamente por él, producido y arreglado
(Salvo el primero, todos los demás fueron producidos por él). Llegó
hasta el 10º puesto en las listas de éxitos comerciales, la mejor
posición obtenida nunca y que se convirtió en disco de oro dos años
después. Su resultado fue la mezcla de grabaciones recientes y otras
de archivo. La primera cara del álbum fue grabada al mismo tiempo y
con la misma banda que el que fue su antecesor “Over nite
sensation”. Los cortes de la 2ª cara son sesiones de 1972
con sobregrabaciones de 1973.
En
cuanto al aspecto musical del álbum no es fácil explicar con
palabras el perímetro en el que se mueve, ya que aborda todo tipo de
estilos, y lo hace meteóricamente, ya que pasa de un ritmo a otro en
cuestión de nada y las fronteras no son discernibles. La velocidad y
le virtuosismo es algo que van unidos de la mano y nunca puedes
afianzarte en la escucha de un fragmento porque los cambios son
numerosos e inesperados. El comienzo se lleva a cabo con unas ráfagas
de viento, un vendaval en toda regla que nos pone alerta del
“vendaval” que se nos viene encima, y que por otra parte es
normal viniendo de Zappa.
Cuando
acaba la ventisca, entra un pieza corta “Don't
Eat The Yellow Snow “ en la que el
bajo y la batería establecen un ritmo sugerente, aparecen coros, la
voz de Zappa y una serie de metales que conceden un aire muy soul,
pero sin tiempo pasa al siguiente, “ Nanook
Rubs It”
un tema también bastante vertiginoso, histriónico con burla y
humor, algo común, una tónica en su forma de entender la música.
Música densa, cargada donde no da tiempo a percibir todos los
matices que van pasando sin cesar con un montón de arreglos,
produciendo un rock concentrado. La guitarra trabaja con notas de
escala altísima en las partes de los solos, que resultan ser como
una cuchilla afilada moviéndose a una velocidad endiablada, dignos
del Heavy Rock, mientras el tipo nos adereza con una retahíla
parlanchina llena de efectos guturales. “
St. Alfonzo's Pancake Breakfast”
es otra pieza que se mueve en los mismo cánones que la anterior, muy
corta y simpática, una especie de anuncio del pancake.”
Father O'Blivion”
acelerada, sin respiro con percusiones finales muy latinas
desembocando en el último corte de la primera cara “Cosmik
Debris”,
otra composición con ritmo y piano eléctrico sugerentes a los que
se une la voz del genio en los mismos términos, se mueve entre el
soul y el blues con introducción de cuñas que nos sacan de la
ensoñación. De fondo nos acompaña un xilófono y la guitarra plena
de ácido.
Cuando
le damos la vuelta al vinilo, la atmósfera cambia, y es que como he
dicho ya, no son composiciones que correspondan al mismo periodo de
grabación que las de la cara 1. Nos vamos a encontrar con tracks de
más duración y con una estructura en su ejecución más propia del
Rock al que estamos acostumbrados fuera de la órbita Zappa.
El
sonido es mas serio, dejando apartado la vena ocurrente bastante más
apartada. Arranca con la rápida “Excentrifugal
Forz”,
un excelente entrante de ritmo adictivo que desemboca sin tiempo en
la pieza clave del este álbum y que se llama igual “Apostrophe”,
composición completa, muy rockera donde por primera vez encontramos
riffs de guitarra que se repiten, hasta ahora inédito. Aires hard y
progresivos es lo que más transmite incluyendo un largo desarrollo
instrumental con solo de guitarra mostrando diferentes matices en las
cuerdas en un monólogo extenso, bajo la acidez del bajo de Jack
Bruce que no se esconde y que demuestra porque es un bajista de
categoría. “Uncle
Remus”,
tal vez es el track más prescindible y el que menos aporta, para
acabar con “Stink-foot”otro
largo pasaje lleno de buena música en la que el bajo establece un
riffs atractivo que se pasea hasta el final y sobre el que van
sucediéndose arreglos blues del piano, una guitarra lejana soltando
zarpazos ácidos y una sección rítmica también atractiva. Conforme
se acerca al final se van acelerando todos los instrumentos y surgen
coros de voces con unos cánticos muy africanos que ponen el punto
final al disco.
Un
personaje tremendo, con material infinito e insondable donde hay que
tener narices para llevar a cabo prospecciones, nunca se le sacó
tanto jugo a seis cuerdas.
"Mike Olfield fue el artista individual más sorprendente, porque su primer LP, Tubular Bells, lo grabó integramente tocando él todos los instrumentos, que fueron 28, en 80 tomas de estudio hechas por separado. Un trabajo de ingeniería que marcó una época.
Tubular bells apareció justo antes del estallido de la crisis en la que, entonces, era la primera apuesta de una nueva discográfica, Virgin Records. Virgin eran las tiendas de mayores ventas de discos, y Richard Branson, su dueño, también quiso su editora. Gracias a Tubular bells la convirtió en una potencia y él acabaría siendo multimillonario.
Mike y Richard
Cuando estalló la crisis el disco se quedó sin existencias y no pudo ser reeditado ni repuesto en las tiendas por falta de vinilo. Pareció morir sin más, hasta que la música fue incluida en la banda sonora de la película El exorcista, la más vista de entonces y, esta vez sí, su reedición lo llevó al nº 1 en todo el mundo. A partir de aquí Oldfield se convirtió en uno de los grandes, con una serie de álbumes impecables."